Las baterías de iones de litio de fosfato de hierro y litio (LiFePO4) se destacan por sus características excepcionales de seguridad, larga duración del ciclo y amigabilidad con el medio ambiente. Poseen una estructura química termalmente estable que inhibe el riesgo de fuga térmica. Desde una perspectiva de costo, estas baterías son ventajosas para el almacenamiento de energía a largo plazo ya que proporcionan más de 3000 ciclos de carga y descarga. Las baterías LiFePO4 son flexibles para su uso en sistemas de energía solar, vehículos eléctricos y unidades de alimentación de reserva debido a su relativamente alta densidad de energía, baja tasa de autodescarga y mayor fiabilidad y seguridad.